Antitusígenos, expectorantes y mucolíticos.


Los fármacos antitusígenos se utilizan para tratar la tos seca y no productiva, mientras que los expectorantes y mucolíticos se utilizan para tratar la tos productiva y facilitar la eliminación del moco. Algunos ejemplos de estos fármacos son:

  • Antitusígenos: son fármacos que actúan sobre el centro de la tos en el cerebro, reduciendo la frecuencia y la intensidad de la tos. Algunos ejemplos de antitusígenos son la codeína, el dextrometorfano y el butamirato.
  • Expectorantes: son fármacos que actúan estimulando la producción y eliminación del moco en las vías respiratorias. Algunos ejemplos de expectorantes son la guaifenesina y el ambroxol.
  • Mucolíticos: son fármacos que actúan disminuyendo la viscosidad del moco y facilitando su eliminación. Algunos ejemplos de mucolíticos son la acetilcisteína y la bromhexina.

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